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Pese al deterioro económico, Trump mantendrá su apuesta. Tras el ajuste de los mercados, lo hacen ahora los bancos centrales. La política de confrontación continuará. No son solo los mercados los que reaccionan, con distinto grado de ajuste, al cambio de las condiciones que se impone desde EE.UU. Las reuniones de los bancos centrales que están teniendo lugar estos días, tienen un patrón común: el entorno es ahora más incierto para el crecimiento y la amenaza inflacionista, aumenta.
La deuda pública de los 27 países que integran la Unión Europea está por encima de los 17 billones de euros, de los que 1,6 billones corresponden a España. En ese mismo periodo, el año pasado, la deuda pública de Rusia alcanzó los 364.000 millones y la de Ucrania los 160.000, un poco menos de la mitad. Si miramos a Estados Unidos la cifra de dispara a los 30 billlones , mientras que la de China es exactamente la mitad. Son datos en bruto, que tienen su correlacición con el PIB de cada país y su capacidad industrial y financiera, pero sirven de base para explicar la razón profunda del mantenimiento de la guerra en Ucrania al margen de las intenciones anexioanistas de Vladimir Putin y de la defensa territorial de Volodomir Zelensky.
De las 10 toneladas de fentanilo que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza incautó en 2024, 19.5 kg lo fueron en la frontera con Canadá, el 0.2%. Amparado en la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional, que permite al presidente tomar medidas excepcionales al margen del poder legislativo por causa de emergencia nacional cuando considera que afecta a la economía o a la seguridad del país, decretó un arancel a las importaciones de Canadá del 25%.
Aunque un acuerdo formal parece imposible, las amenazas arancelarias de Trump podrían tener en última instancia un efecto similar al Acuerdo Plaza de 1985 al forzar políticas expansivas en China y Europa.
Puede parecer mentira, pero abundan estos días los análisis que, con la excusa de que el dólar ofrece un pobre balance en lo que llevamos de año, hacen referencia a cierto desencanto respecto a lo que esperaban de las políticas de la nueva administración norteamericana.
Aun no se ha cumplido un mes desde su regreso a la Casa Blanca, pero que su discurso plagado de excentricidades y contradicciones no nos despiste. Tiene claro lo que pretende y está dispuesto a lograrlo. Que estamos frente a un cambio muy importante en la forma en la que se han mantenido las relaciones internacionales es evidente. Los mercados están respondiendo con agitación, pero sin manifestación alguna de pánico.
¿Por qué la guerra arancelaria ha comenzado con México y Canadá? El asunto es complejo, pero ¿se trata realmente de lograr el equilibrio en la balanza comercial?
¿Podría la brecha que se abre entre los tipos de interés a uno y otro lado del Atlántico ser solo un primer paso de algo más que podamos considerar poco o nada descontado en los actuales precios de mercado? Hasta final de 2024, y aunque a ritmo distinto, tanto la Reserva federal como el Banco Central Europeo acumulaban un recorte de tipos desde el fin del ciclo alcista de cien puntos básicos. La semana pasada, en la que ambos celebraron au primera reunión de 2025, se abrió una brecha sin perspectivas inmediatas de cierre
| De izquierda a derecha, Roberto García Merino, CEO de Redeia; José Vicente de los Mozos, CEO de Indra Group; Ángel Escribano, presidente de Indra Group; Beatriz Corredor, presidenta de Redeia; Mariano Aparicio, director Comercial del Negocio de Telecomunicaciones de Redeia. |
Como se daba por sentado desde hace varias semanas, Indra Group, el holding empresarial tecnológico, del que forman parte Indra -una de las principales compañías globales de defensa, tráfico aéreo y espacio; y Minsait, líder en transformación digital y tecnologías de la información en España y Latinoamérica- ha suscrito un acuerdo con Redeia Corporación para la adquisición del 89,68% del capital social de Hispasat, operador y proveedor de servicios por satélite, por un importe de 725 millones de euros.
En apenas unas horas las grandes compañías tecnológicas de Estados Unidos sufrían un golpe financiero brutal y otro golpe mercantil. Un ingeniero chino de 40 años, Liang Wenfeng anunciaba el lunes la legada al mercado de DeepSeek, la Inteligencia Artificial gratuita capaz de hacer frente y de superar en algunos aspectos a lo que ofrece Chat GPT y Nvidia. Está última, liderada por Jen-Hsun Huang, perdía en bolsa 600.000 millones de dólares. Menos, pero también perdían, Elon Musk, Jeff Bezos, Mark Zukenberg y Larry Ellison. Entre los cinco más de un billón de euros de fortuna. Era la respuesta de Xi Jianping a Donald Trump tras su llegada a La Casa Blanca y su catarata de decretos y amenazas con aranceles a las importaciones de Estados Unidos.
La primera semana del presidente deja claro que tiene como primer objetivo defender lo que entiende como intereses económicos de EE.UU. y no reparará en desestabilizar a aliados y enemigos. Una sola semana después del cambio de presidencia en EE.UU. ya permite un primer balance. Muchos e importantes anuncios en el frente geopolítico, pero menos claridad en el de los aranceles.
“…y lo que es más importante, debemos de asegurarnos de que el dólar estadounidense siga siendo la divisa de reserva mundial”, Scott Bessent en su audiencia de confirmación en el Senado como nuevo secretario del Tesoro.
La “angustia” fiscal que se ha venido gestando a lo largo del mes de diciembre, parece estar alcanzado su punto álgido en las primeras semanas del año. ¿Están los mercados testando los límites o es un cambio de régimen? A principios de diciembre, PIMCO, una de las más importantes gestoras de inversión particularmente conocida por sus estrategias con la renta fija donde es el mayor gestor del mundo, anunció que recortaría su exposición a la deuda a largo plazo norteamericana. Su argumento: la sostenibilidad del déficit y la amenaza inflacionista de la política arancelaria de la Administración entrante.
Por muy bien que puedan ir las economías y así lo destaquen los analistas, el número de países cuyos electores se orientan hacia posiciones extremas es creciente. Particularmente entre los hombres jóvenes. Cambiamos el almanaque, pero los temas que dominaban las últimas semanas del año pasado, siguen siendo los mismos. Normal que sea la inercia lo que con más fuerza se percibe en los mercados financieros. Tenemos como termómetro la evolución del dólar en los primeros días de 2025 tras cerrar el año en 1.0389 con el euro.
Marta G.G.
El año 2025 arrancará con subidas en los precios de las tarifas de las principales compañías de telecomunicaciones, en la factura de la luz y en los alimentos por la retirada de las rebajas impositivas a la electricidad y el IVA, así como en los sellos necesarios para el envío de cartas y tarjetas postales.
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