Andalucesy vascos dejaron en el baúl de los recuerdos a los exiliados de Méjico y con la ayuda económica y el apoyo internacional de Willy Brandt y Olaf Palme convirtieron a los herederos de aquel Pablo Iglesias fundador en serios aspirantes a gobernar en España. Lo consiguieron y desde la muerte de Franco en 1975 han dirigido este país durante 22 años; y si dejamos a un lado la Primera Transición - la que va de 1975 a 1982 - la socialdemocracia liberal que definió el propio González para justificar sus cambios de rumbo ha gobernado el doble de tiempo que la derecha conservadora que representan José María Aznar y Mariano Rajoy.
Patxi López es un Pedro Sánchez sin aristas y con un pasado de gobierno y desgobierno, de victorias y derrotas, de cargos públicos y silencios bien pensados. Ha pasado de apoyar a muerte al ex secretario general a cerrarle cualquier posibilidad de regreso. Quiere los votos y apoyos autonómicos de los que gozó Sánchez, sin los rechazos que generó tras perder dos elecciones y querer evitar un tercer descalabro pactando un gobierno de concentración de las izquierdas con elPodemos de Pablo Iglesias y la Izquierda Unida de Alberto Garzón.
López quiere aprovechar el sentimiento del no que existe en el PSOE hacia Susana Díaz desde Despeñaperros hacia arriba. Se ha apresurado a plantear su candidatura para evitar la del propio Sánchez o la de Eduardo Madina. Ha hecho lo que no hizo José Bono tras la dimisión de Joaquín Almunia - que esperó hasta el final para hacer lo que todo el mundo sabía que iba a hacer - y que al final le costó al político de Albacete y presidente de Castilla la Mancha la derrota frente a José Luís Rodríguez Zapatero.
El exlendakari quitó el poder al PNV pero se lo deevolvió a los cuatro años y ha dejado al PSOE vasco en la peor de las situaciones, con un futuro incierto y colocado en cuarta posición entre las fuerzas políticas. Un bagaje discutible que le pasará factura en su lucha con la presidenta andaluza que, ella sí, se presentará como vencedora y sin los recuerdos de Sánchez en sus alforjas.
Los dos están fuera del Congreso de los diputados, un factor muy importante a la hora de liderar la oposición, si bien ambos pueden estar en el Senado por representación territorial. No parece quería bayan a tener un tercero/a en discordia y que dependerá su futuro de lo que hagan Federaciones como la valenciana y la madrileña, con la incógnita de si en la pelea se acepta la `participación de los "Independentistas" catalanes del PSC, el otro gran núcleo con que se ha contado para la gobernanza del socialismo, siempre con dudas y amenazas por ambag partes.
Si Patxi López no tiene nada que perder y sí todo por ganar, a Susana Díaz le pasa justo lo contrario. Gobierna en Andalucía, que es mucho, y no parece dispuesta a dejar el despacho en el palacio de San Telmo para encerrarse en la se de de Ferraz. Lo lógico, si se presenta y gana - que es lo más probable - es que mantenga la presidencia del gobierno andaluz por lo menos hasta que se planteen elecciones generales ( otro punto a favor de Mariano Rajoypara la aprobación de los Presupouestos Generales ) y tenga que abandonar el cargo. Ser secretaria general del PSOE y estar en Sevilla es compatible y hasta necesaria en su caso para mantener una presencia a nivel nacional. Otra cosa es quien asume la portavocía en el Congreso, salvo que Díaz y los suyos dejen que Antonio Hernando siga, que es lo que ha hecho la Gestora de Javier Fernández. Este, que ha cumplido con creces la misión para la que fue elegido regresará a Asturias salvo que... le convenzan para dar el paso de presentarse en el escenario de la pelea y como secretario general con plenos poderes dejar para dentro de tres o cuatro años la elección definitiva a encabezar las listas socialistas.
De lo que ocurra antes, durante y después del Congreso Federal del PSOE dependerá no sólo el futuro de este partido, tambiémn el de la izquierda en general y el de los equilibrios de la política española. Este es el panorama que favorece sobre todo a Rajoy y al PP. Y así será si tenemos Presupuestos. Sin ellos y con una nueva conovocatoria a las urnas todo serádistinto..
Si (
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