Iglesias no quiere un " menage" a tres

El líder de Podemos no quiere un "menage a trois" que dirían los franceses con el PSOE y Ciudadanos. No quiere mezclas programáticas que confundan al electorado. Nada de grandes acuerdos de derecha a izquierda. El quiere que los españoles tengan claro a lo que se enfrentan si se forma un Ejecutivo de los suyos con los socialistas que dirigen Ferraz. No engaña: o conmigo o sin mí, le ha dicho a Sánchez mientras el secretario general del PSOE manda a su equipo a negociar con el equipo de Rivera.

La gran diferencia entre los dos dirigentes está en sus objetivos: Sánchez quiere reformar, mientras que Iglesias quiere cambiar. Para el primero su gran objetivo es llegar a la Moncloa para convertirse en el segundo gran reformador del Sistema, de la misma manera que lo fue Felipe González en 1982. Socialdemocracia con toques liberales ni más ni menos. Por eso puede entenderse mejor con Rivera y Ciudadanos, que mezclan los mismos ingredientes ideológicos cambiando el orden.

Hemos comprobado mil veces que en política lo imposible hoy es lo realizable mañana, y que las negaciones eternas duran menos que una tarta a la puerta de un colegio, pero puede que en estas semanas que se ha dado Pedro Sánchez para lograr los apoyos necesarios para su investidura, la posición de Iglesias no cambie y que al líder del PSOE no le quede más remedio que acudir a Podemos y buscar al PNV para que vote si y a Convergencia y Esquerra para que se abstengan.

La otra alternativa, la que llevan proponiendo desde los ámbitos socialistas desde finales de diciembre, para que no haya que repetir las elecciones e impedir, al mismo tiempo, que Iglesias y los suyos se sienten en un Consejo de Ministros, que es la abstención del PP previa decapitación de Mariano Rajoy no parece probable que se produzca. Habrá sido más fácil de haberse atrevido el presidente en funciones a subir al estrado del Congreso e intentar su propia investidura, pero por miedo, por pereza, por astucia o por " conocimiento de lo que le esperaba" decidió que iba a esperar sentado en el sillón de la Presidencia.