Merkel, Draghi y ¿Euro Vegas?

Mientras comían, el señor Draghi se las veía con el Consejo del BCE. Los expertos en esta institución intuyen que el debate no debió ser fácil y aunque haya sido Alemania la que se haya votado en contra de las decisiones adoptadas, las reticencias se extienden a otros países del norte de Europa, dispuestos a dar dinero pero bajo una muy estrecha vigilancia.

Lo peor que hubiera podido ocurrir es que el BCE no hubiera tomado decisión alguna. Por lo menos ha dado un paso. Un paso que solo puede sorprender a los pocos ingenuos que en algún momento han pensado que desde la Unión Europea nos iban a dar dinero sin garantías previas. A falta de conocer la letra pequeña, es decir las condiciones establecidas, no cabe duda que la tarea urgente del Gobierno_ ya la viene haciendo_ es negociar lo más habilidosamente posible para que las condiciones sean lo más suaves posibles. Además, el Presidente deberá informar al Parlamento y bueno sería que tuviera una larga conversación con el líder de la Oposición.

El paso que necesariamente tiene que dar España que no es otro que el de acudir a pedir ayuda, no es un paso fácil ni agradable, pero todo indica que absolutamente imprescindible. En octubre hay que pagar 24.000 millones de vencimientos de deuda y no los tenemos. Este camino, el del rescate, aún no ha comenzado, pero es obvio que va generar debate y el mismo debe estar liderado por el propio Gobierno, primero, para explicar a los españoles el alcance, la necesidad y las consecuencias del mismo y, segundo, en el Congreso en donde con toda probabilidad no recibirá apoyo pero el Presidente cumple así una obligación institucional.

Si se acude al rescate, la prima de riesgo se relajará, la bolsa subirá y en conjunto los mercados dejarán de estar a la que salta. Pero debe saberse que el rescate viene bien a las grandes cifras pero el ciudadanos en su vida cotidiana no va experimentar mejoría alguna, al menos a corto plazo. Siendo esto así, lo cierto es que no tenemos dinero, que lo debemos pedir fuera y que o nos ayudan o no podremos levantar la persiana. Acudir al rescate no es una alegría y mucho menos un éxito. Es, una medicina necesaria para un enfermedad grave. Pero la jornada de ayer no acaba aquí. Resulta que todo apunta a que Euro Vegas se va a instalar en Madrid. Es mas que probable que no cree 200.000 empleos y aunque por muchos sea considerado un éxito, para valorar el alcance real de la idea, habrá que leer también la letra pequeña. A muchos nos gustaría más un buen parque tecnológico, pero es lo que hay y con todas las reservas que se quieran poner, es seguro que si finalmente llega a Madrid, miles de madrileños verán en la iniciativa una esperanza que ahora no tienen.