Hasta ahora disfrutaban del cargo inestable que les va concediendo y aplaudían su nepotismo porque les beneficiaba, pero han descubierto que ha entrado en una dinámica sicaria y suicidad.
Tiene toda la pinta de querer instaurar en España un régimen peronista y ha encargado al ministro más gañán de su gobierno que insulte al Presidente de Argentina, Javier Milei, demostrando su ausencia de principios institucionales, un comportamiento que jamás tendría con los presidentes de Venezuela, Nicaragua o Colombia.
Pero regreso a lo mollar de esta reflexión porque a Sánchez se le está acabando la suerte gracias al miedo que sienten los suyos por perder el chollo de la mamandurria fácil, no exigente-
Ya no ahorran en calificativos ni Alfonso Guerra, ni ninguno de los históricos socialistas que sienten vergüenza de que el PS se haya convertido en una plataforma sumisa frente a un aprendiz de dictador con antecedentes de prácticas fraudulentas por intentar ganar una votación – cuando las había – en su propio partido.
No sé cuántos, pero muchos socialistas se sienten como viudas abandonadas y desconsoladas que sueñan con que el hombre que dice que está enamorado de su mujer les haga a ellas también un mimo… o se vaya de una puñetera vez.
A este iletrado al que le escriben los libros que firma y no sé si lee alguno, podían pasarle un resumen de “Crónica de una muerte anunciada”. Es muy posible que pregunte quién es el autor, pero lo importante es que memorice el título, porque su muerte política le ronda y no sé si se ha dado cuenta.