Al líder de la selección marroquí de futbol no le gusta nada haber nacido hace 25 años en el madrileño pueblo de Getafe. No le gusta nada que tras formarse como futbolista en el Real Madrid hasta 2020 pasara a jugar con el Borussia Dortmund, luego con el Inter de Milan, hasta llegar al PSG parisino. Una rentable carrera profesional a la que no acompaña su caracter y su facilidad para buscarse problemas dentro y fuera del campo.
En el partido contra España y tras intentar desestabilizar al guardameta de nuestra selección, no supo encajar la derrota - al igual que les pasó al resto del equipo de Marruecos, incluido su entrenador - y se obsesionó con la idea de humillar al país en el que ha nacido. Sin conseguirlo, claro.
De padres marroquies, Achraf nació el 4 de noviembre de 1998 en Getafe y con 17 años ya estaba jugando en el Real Madrid y en la selección de Marruecos. Condiciones físicas y calidad le convirtieron en una estrella, condición que aumentó tras su boda con la actriz Hiba Abouk, también madrileña y de origen tunecino y libio, doce años mayor que él y con la que tiene dos hijos. Se casaron en secreto en 2020 pero ya llevaban dos años juntos. La diferencia de edad y de modos de vida llevó a la actriz a pedir el divorcio tras ser acusado el jugador de una violación en su casa de Paris en marzo de 2023.
Inteligente, de temperamento volcánico y un caracter competitivo que le lleva a traspasar los límites en el campo de futbol, el último incidente en el encuentro entre las dos selecciones ha demostrado que no sabe perder y que está dispuesto a romper los límites con tal de lograr la victoria. Un mal ejemplo para todos y que explica el cambio de equipos y su mala adaptación con sus propios compañeros de vestuario.
Habla cuatro idiomas: español, árabe, inglés y francés pero le molesta, al parecer, que le recuerden que empezó a jugar con siete años en el Club Deportivo Colonia Ofigevi, de Getafe, desde llegó a las categorias inferiores del Real Madrid. Desde esa base y peldaño a peldaño hasta llegar a la máxima categoría en 2017, con el dorsal 19 y estreno en la Liga frente al Español y ya asentado en su puesto de defensa y centrocampista.
Hay que reconocer que desde el Real Madrid le utilizaron como “ pieza de intercambio”, tanto hacia el Dortmund como hacia el Inter y el PSG, donde llegó en 2021 y con un contrato por cinco temporadaa y sesenta millones de euros, según publicó el diario The Guardian. Todo un triunfo para el niño que había nacido en el barrio de Juan de la Cierva y que dió sus primeras patadas al balón gracias a los deseos del promotor de viviendas Rafael Torralbo, que tiraría la toalla deportiva en 2009, con el club en grave crisis por las deudas acumuladas.