El ministro portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, cree que "se ha sido injusto" con la ex alcaldesa de Valencia Rita Barberá, fallecida este miércoles de un infarto, y ha admitido que "probablemente en muchos casos son injustas" las medidas que han tomado los propios partidos contra la corrupción, porque "no tienen en cuenta la presunción de inocencia".
"La reflexión que tenemos que hacer todos es decir que en casos como estos tenemos que estar más cerca de las personas, acompañarlas más, ese es el reproche que algunos nos podemos hacer, teníamos que haberla llamado más, haber dado el calor de no sentirse solos", ha dicho en una entrevista en una cadena privada, recogida por Europa Press.
Barberá falleció repentinamente apenas dos días después de declarar ante el Tribunal Supremo por un presunto delito de blanqueo, motivo por el que en septiembre pidió su baja del PP, después de semanas de presiones, pero mantuvo su escaño en el Senado.
Para Méndez de Vigo, con Rita Barberá "y por desgracia en otros casos", "no se ha respetado la presunción de inocencia", un derecho constitucional que hay que "hacer respetar" mientras un tribunal no dicte sentencia.
Así, cree que este caso ha sido "muy duro" porque "al final", de lo que se le acusaba era de si "había blanqueado 1.000 euros" y eso "no es como para decir las cosas que se han dicho de ella". Por eso, comprende que "estuviera muy triste" y cree que "no
merecía esto".
SOBRE AZNAR: CADA UNO ES DUEÑO DE SUS ACTOS
Preguntado por los reproches que lanzó al PP el presidente de honor del partido, José María Aznar, se ha limitado a afirmar que "cada uno es dueño de sus actos y será él quien tendrá que responder". Y ha añadido: "Rita era una persona generosa y si en algún momento se ha sentido dolida estoy seguro de que donde esté ya habrá perdonado".
También ha asegurado que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, siempre ha insistido mucho en que hay que defender la presunción de inocencia y ha advertido de que se puede ser "muy injustos". El ministro ha recordado que Rajoy habló con Barberá el lunes, el mismo día en que ella fue a declarar ante el Supremo.
Preguntado si el PP tomó decisiones precipitadas por la presión mediática, ha replicado que en España "todos" han tomado medidas muy duras para atajar los casos de corrupción "y probablemente en muchos casos esas medidas sean injustas porque no tienen en cuenta la presunción de inocencia".
NO QUERÍA DAÑAR AL PP POR UN TEMA QUE VEÍA "IRRISORIO"
En todo caso, ha subrayado que fue ella quien pidió la baja del PP para no dañar la imagen del partido, "porque quería a su partido y no quería que eso fuese utilizado por otros contra su partido por un tema que ella consideraba irrisorio y que no tenía ninguna virtualidad".
De hecho, ha añadido que le habría gustado ver el final del proceso a Barberá, porque está convencido de que finalmente "no habría tenido ninguna relevancia penal".