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El Real Madrid tratará de resarcirse en las fechas próximas de su derrota en El Clásico

Martes 25 de abril de 2017

El Real Madrid se llevó un jarro de agua fría en la última jugada de su partido contra el FC Barcelona, en una edición más del mejor partido que pueda verse en el panorama futbolístico mundial.



Cuando estos dos equipos juegan, medio planeta se paraliza, y ésta ocasión no resultó una excepción a la regla. Leo Messi anotó el tercer y definitivo tanto para los suyos (2-3), que serviría a la postre para que el conjunto catalán empate en estos momentos con su eterno rival en lo más alto de la Tabla. Ambos conjuntos disponen actualmente de 75 puntos; eso sí, los blancos siguen conservando cierta ventaja sobre el equipo blaugrana, ya que tienen un partido aplazado contra el Celta de Vigo en el Estadio de Balaídos, feudo del conjunto gallego.

Por si fuera poco, a la difícil enmienda de conquistar por fin el tan ansiado campeonato liguero, hemos de añadir la difícil prueba que se presentará para los pupilos de Zidane muy pronto, ya que Atlético y Real Madrid se enfrentarán tras el sorteo de Semifinales de Champions League.

El Clásico no decepcionó en cuanto a sus expectativas previas, y se vivió un partido tremendo donde ambas escuadras gozarían de alternativas y oportunidades para arrimar el partido a sus intereses y fastidiar al enemigo. Llama poderosamente la atención el hecho de que, si obviamos a Messi, y con 5 goles en el total de la disputa, los dos mejores hombres de cada grupo fuesen sus porteros. Ter Stegen por el bando catalán, y el tico Keylor Navas por los madridistas, firmaron una actuación más que meritoria, e impidieron que el marcador no acabase siendo en cuanto al total de goles aún más sonoro y llamativo.

Al poco de empezar, Samuel Umtiti cometió penalti sobre Cristiano Ronaldo, pero el árbitro hizo caso omiso a las reclamaciones de la parroquia que llenaba Chamartín. Un rato después, sería Casemiro quien adelantase a los suyos, tras una jugada previa a pelota parada. Corría el minuto 28, y tras un remate al palo de Sergio Ramos, posterior desafortunado protagonista para los suyos, el “stopper” brasileño recogería el rechace para marcar a placer.

Parecía un golpe importante para la Liga, pero Messi no desaprovechó la primera que tuvo, y logró empatar cuando únicamente habían transcurrido cinco minutos tras el gol inicial.

Con este resultado el partido se marchó al descanso, habiéndose jugado el propio mediocentro madridista la segunda tarjeta amarilla, escasos compases previos al pitido que decretaba dicho alto al fuego momentáneo.

El segundo acto empezó con un Barcelona más convencido, y que empezó a amansar más la pelota con sentido. En el Madrid, la entrada de Asensio por Bale resultó providencial. El galés volvió a caer por enésima vez con su ya tradicional problema en el sóleo, y dio entrada a un chico que promete dar muchas alegrías a la hinchada vikinga.

No obstante, serían los visitantes quienes golpeasen de nuevo, con un brillante zurdazo con potencia de Rakitic, que sorprendió al arquero costarricense del Madrid. Era el 73, y con la protestada expulsión de Sergio Ramos escasos seis minutos después, el partido parecía más que encarrilado para los culés.

El Barcelona quedaba un Clásico más en superioridad numérica, pero el Madrid no se rindió. Tras una gran internada de Marcelo, decisivo en ambas áreas durante la noche, el recién entrado James Rodríguez aparecería en el primer palo, poniendo el interior de su bota izquierda y anotando el 2 a 2, para júbilo de un público que veía como su equipo sacaba casta ante la adversidad.

Sin embargo, el Madrid pecó de un exceso de pasión, y no fue capaz de conservar un resultado que, le habría valido para tener a tiro “medio campeonato”.

Los de Zidane se fueron arriba, soñaron incluso con remontar a pesar de tener un hombre menos, y lo pagaron caro.

En la última jugada del choque, Marcelo no detuvo una arrancada de Sergi Roberto desde su campo, que finalizó con Jordi Alba dejándole una pelota a Messi en la frontal, para que el astro argentino decantara la contienda hacia la Ciudad Condal.

El Madrid no pensó en el fragor de la batalla el valioso tesoro que lograba anotarse con el tanto del cafetero James, y siguió a por todas. Messi, audaz general sobre el terreno, no desaprovechó la ocasión para aplazar el desenlace virtual del torneo.

Sin más tiempo para lamentos, el Madrid visitará el miércoles Riazor (La Coruña), donde espera sumar 3 puntos imprescindibles.


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