En un estudio reciente, las personas con artritis reumatoide que consumieron pescado dos veces por semana tuvieron una menor actividad de la enfermedad (hinchazón y sensibilidad de las articulaciones junto con otras evaluaciones) que las que no comieron pescado nunca o una vez al mes.
También hubo una asociación gradual, por lo que el aumento de las porciones de pescado se vinculó con niveles cada vez más bajos de la actividad de la enfermedad. En esta investigación de 176 pacientes, la frecuencia del consumo de pescado se evaluó mediante un cuestionario de frecuencia de alimentos que analizó la dieta habitual en el último año.
"Si nuestro hallazgo se sostiene en otros estudios, sugiere que el consumo de pescado puede disminuir la inflamación relacionada con la actividad de la artritis reumatoide", apunta la autora principal del trabajo, la doctora Sara Tedeschi, del 'Brigham and Women's Hospital', en Boston, Massachusetts, Estados Unidos.
"Se ha observado que el consumo de pescado tiene muchos efectos beneficiosos para la salud y nuestros resultados pueden dar a los pacientes con artritis reumatoide una razón fuerte para aumentar el consumo de pescado", concluye esta experta, cuyo trabajo se detalla en 'Arthritis Care & Research'