Miércoles 29 de marzo de 2017
La Fundación Amancio Ortega donará unos 320 millones de euros a todas las comunidades autónomas para que puedan adquirir o renovar los equipos de diagnóstico y tratamiento del cáncer de sus hospitales públicos.
En concreto, según ha informado esta entidad, la inversión irá destinada a adquirir más de 290 mamógrafos y equipos de radioterapia de última generación.
La Fundación ya ha alcanzado principios de acuerdo con los departamentos de salud de todas las comunidades autónomas para extender el programa de apoyo a la Oncología española iniciado en 2015 en Galicia que posteriormente amplió el año pasado a Andalucía.
De hecho, dentro de la inversión global anunciada por la Fundación se incluyen los 17 millones donados hace dos años a la comunidad gallega, para comprar 16 mamógrafos y 12 aceleradores lineales nuevos, y los 40 millones que tiene previsto destinar a Andalucía, con los que se adquirirán 25 nuevos equipos de radioterapia.
Cada año se diagnostican en España más de 200.000 nuevos casos de cáncer, de los que al menos un 60 por ciento precisan tratamiento por radioterapia en algún momento de su evolución.
Y para ello, según señala la Fundación Amancio Ortega, la incorporación de equipamientos de última generación, tales como la mamografía digital con tomosíntesis o los aceleradores lineales avanzados, es clave a la hora de "realizar diagnósticos más precisos y proporcionar a los pacientes tratamientos más eficaces, menos agresivos y de menor duración".
HAN IDENTIFICADO LAS NECESIDADES DE CADA CCAA
La Fundación ha trabajado con los profesionales de cada servicio autonómico para identificar las necesidades en este ámbito y ver cuántos equipos era necesario renovar o adquirir, ya que hay regiones que no disponen de este equipamiento o lo tenían obsoleto.
De hecho, un informe presentado hace un año por la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) alertaba de que el Sistema Nacional de Salud (SNS) necesitaba 70 equipos para cumplir con los estándares mínimos recomendados a nivel europeo. Y de los existentes, uno de cada tres se consideran obsoletos al tener más de 10 años de antigüedad.
Tras el anuncio de este miércoles, el siguiente paso será formalizar la donación a los diferentes gobiernos autonómicos mediante protocolos específicos y dar paso a los procedimientos administrativos públicos necesarios para la adquisición de los equipos.
Además, según han explicado fuentes consultadas por Europa Press, la inversión no sólo irá destinada a la compra de los equipos sino a su mantenimiento y la formación necesaria para su uso.