Si lo consiguen, la crisis dentro del Barnabeu será imparable y Florentino Pérez tendrá que elegir entre Zidane y el vestuario, entre su entrenador y la necesaria “limpia” en la plantilla. La del PSG ha costado 300 millones más que la actual del Madrid. Una inversión que parece rentable a tenor de los resultados: está en octavos tras derrotar a varios de los grandes europeos y saca 12 puntos al segundo clasificado en la Liga francesa. Sus números son casi tan buenos como los del Barcelona. Tienen dos derrotas y muchas y contundentes goleadas.
En 20 días el Madrid se juega toda la temporada. No hace falta explicarlo. Sin apenas opciones en la Liga y eliminados de la Copa, si no quieren quedarse en cero deben ganar la Champion. Y lo tienen muy difícil. Detrás del PSG, si es que consiguieran pasar a cuartos, le esperan los mejores de Inglaterra y Alemaniq, huesos muy duros de roer y más cuando su delantera “cojea” de forma descarada y su defensa se “despista” con enorme facilidad.
Tácticamente esta temporada Emery le ha ganado a Zidane en sus respectivos territorios. El entrenador francés debe lograr que su equipo salga por lo menos con dos goles de ventaja en el Bernabeu, siempre que el PSG no logre ninguno. Por aquello del doble valor de los tantos. Y en esa tesitura puede plantear un equipo claramente ofensivo, con la BBC desde el principio y confiando en que Cristiano se comprometa con el gol, que Bale no se rompa y que Benzema se despierte ante sus compatriotas.
Resuelto el problema de la delantera y con Modric y Kroos como ejes seguros del centro del campo veremos si elige un refuerzo de ataque como pueden ser Lucas Vazquez, Marco Asensio o Isco,l o se encomienda al duo Casemiro y Kovacic para que ayuden a la más que previsible defensa con Marcelo, Ramos, Varane y Carvajal. El cuatro, tres, tres que a veces funciona y a veces es un desastre.