El presidente de la Generalitat Valenciana y secretario general del PSPV, Ximo Puig, ha abogado, ante la posible investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, por un debate dentro del PSOE "sereno, laico, en el que se hagan todas las propuestas y todas sean respetadas y absolutamente dialogadas y que todo el mundo en este debate cuente con el respeto de los otros". "Yo he dicho por activa y por pasiva cuál es mi proceder, y mi proceder en estos momentos es escuchar, y después de escuchar decidiremos", ha añadido.
Puig ha realizado estas declaraciones durante una visita a Castellón para participar en la apertura de la I Jornada Internacional de Innovación al ser preguntado por la postura del PSPV en el debate abierto en el PSOE respecto a la abstención en la investidura de Rajoy.
Al respecto, el jefe del Consell ha señalado que, tras el debate, habrá que tomar una decisión "en favor de los intereses de los ciudadanos y del interés de aquellos que representamos".
Preguntado por su posicionamiento personal, Puig ha indicado que no se va a pronunciar hoy al respecto, pues lo que está haciendo es escuchando a los militantes, a los dirigentes a las personas que se quieren dirigir a él, con los que va a estar hablando estos días "intentando hacer un diálogo abierto, laico y sin posiciones cerradas y que finalmente produzca un resultado que será visible el próximo domingo".
"Hay que tener en cuenta que estamos en una situación complicada, que desgraciadamente al final es el PSOE, porque los partidos se han borrado, el que tiene que ayudar a salir de este embrollo monumental", ha añadido.
Respecto a si hasta el domingo no se sabrá su opinión, Puig ha insistido en que "hoy desde luego no". "Mi opinión la he referido en muchas ocasiones, y es que tiene que haber un debate sereno y en eso estamos, y viendo todas las consecuencias que tiene la toma de decisiones", ha recalcado.
Según Puig, los ciudadanos después de las elecciones "dijeron lo que dijeron y parece que los actores políticos no les han hecho demasiado caso" y, al respecto, ha subrayado que "intentar decirle a los ciudadanos otra vez que son ellos los que tienen que cambiar de opinión para desatascar esta cuestión me parece bastante irresponsable".
En cuanto a si él es partidario de la disciplina de voto, ha apuntado: "Nosotros acataremos y respetaremos la mayoría, pues lo hemos hecho siempre. Yo lo hice cuando me desautorizaron y no pude hacer la Entesa --al Senado--, por lo que es evidente que en un partido democrático, cuando se toman las decisiones, estas afectan a todos".
No obstante, ha destacado que "es evidente que, previamente a la decisión, todo el mundo tiene derecho a opinar y a exponer su posición". "Yo he dicho por activa y por pasiva cuál es mi proceder, y mi proceder en estos momentos es escuchar, y después de escuchar decidiremos", ha añadido.
Interpelado sobre el hecho de que haya muchos alcaldes que se han mostrado favorables al 'no' en la investidura de Rajoy, Puig ha dicho que las discrepancias forman parte del debate democrático. "El PSOE es un partido democrático, mientras que otros partidos no tienen demasiada concepción democrática porque es el 'ordeno y mando', que aquí no funciona así, y yo respetaré a todos mis compañeros, tengan la posición que tengan", ha insistido.
En cualquier caso, el presidente del Consell ha aclarado que para él la "máxima preocupación" en estos momentos es la gobernabilidad de la Comunitat Valenciana, "y eso me dedico en cuerpo y alma".
Preguntado por si le preocupa la tensión que desde Ferraz se ha trasladado al PSPV después de que la agrupación local de Torrent haya puesto el cuadro del expresidente del Gobierno Felipe González al revés, Puig ha admitido que "es un momento complicado" pero ha subrayado que el PSOE "ha vivido momentos muy complicados, y en estos momentos, el PSOE, como siempre, apoya el interés general de los ciudadanos, y en el momento de debate todo el mundo tiene que tener el suficiente respeto a los que no piensan como él".