Por Marta Gómez Galán
El rey Felipe Vi afirma en la clausura del Congreso de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos que “España necesita de líderes empresariales” y la vicepresidenta de Economía, Nadia Calviño, reconoce que “solo actuando conjuntamente se pueden sacar proyectos de país de esta envergadura”
El Rey Felipe VI presidió el acto de clausura del XIX Congreso de Directivos CEDE- Confederación Española de Directivos y Ejecutivos, que se se celebró en el Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia, bajo el lema de‘El tiempo del liderazgo transformador’, el eje sobre el que giraron las ponencias.
El monarca resaltó la situación que vivimos por causa del Covid 19 y “la honda preocupación que genera en el ánimo de todos las dificultades y la incertidumbre que, de una u otra manera, condicionan la vida estos días, tanto en nuestro país como en gran parte de Europa y el Mundo”
Para Felipe Vi, “España necesita de líderes empresariales que busquen y encuentren la forma de potenciar y mejorar el tejido productivo. Son precisos instrumentos innovadores y sostenibles para recuperar los ritmos de crecimiento de hace tan solo un año”.
“Desde Europa -afirmó el Rey-, se está haciendo un gran esfuerzo, con pragmatismo y solidaridad, para luchar juntos y hacer frente a los nuevos retos. Debemos ser conscientes de ello, y valorar las medidas y propuestas de los nuevos mecanismos de recuperación. Focalizarse en la sostenibilidad como eje de acción y apostar decididamente por la transformación digital permitirá que España lleve a cabo esa reestructuración tan necesaria para salir de la crisis”.
“Este entorno cambiante obliga a reflexionar sobre un nuevo orden geopolítico internacional, y es ahí donde la UE, y España, podrían desempeñar de nuevo un papel crucial en los mercados mundiales. En tiempos en los que emergen tendencias proteccionistas debemos apostar por medidas que permitan a nuestras empresas acceder a terceros mercados en igualdad de condiciones. La política comercial de la UE ha de facilitar el crecimiento de nuestras empresas a través de los mercados exteriores, y debe hacerlo al tiempo que fomenta el respeto a los derechos humanos, a los derechos laborales y el medio ambiente”.
El presidente de la Fundación CEDE, Isidro Fainé, aseguró en la clausura que nos enfrentamos “a una realidad internacional muy cruda y especialmente grave en España, y no parece fácil que tengamos una recuperación rápida. Pero también sabemos perfectamente lo que nos toca hacer para ayudar a superar esta situación de crisis compleja desde nuestro rol de empresarios y directivos”.
Para Fainé “debemos estar mentalizados y preparados para un periodo de dificultades cuya duración e intensidad son inciertas. Hoy por hoy, nadie está en condiciones de realizar pronósticos fiables sobre estas cuestiones. Esta crisis y la posterior recuperación tendrán efectos muy desiguales: unos países se desenvolverán mejor que otros; unos sectores funcionarán mejor que otros; unas empresas saldrán fortalecidas, mientras que otras se debilitarán e incluso podrían desaparecer; y unos colectivos sociales, en última instancia, sufrirán más que otros, como ya se empieza a ver”.
En opinión del presidente de la Fundación CEDE “esta pandemia no es una crisis cualquiera, es una crisis transformadora. Está actuando como catalizador de diversas fuerzas de cambio que ya estaban en marcha. Y además ha sido el desencadenante de otras nuevas tendencias. España tiene bazas a jugar para situarse entre los ganadores. Pero no nos engañemos, no lo tenemos nada fácil”.
“Por un lado, hemos comprobado, con cierta frustración, lo que ya sabíamos: que antes de la crisis, no habíamos hecho todos los deberes para construir una economía: sólida, flexible y, por tanto, resiliente, como las de algunos países del Norte de Europa. Por otro lado, hemos visto con esperanza que las políticas públicas, así como las actuaciones de las empresas y de los trabajadores, han intentado proporcionar las mejores respuestas posibles. Pero los resultados han sido más bien dispares, ya que en algunos casos, no han alcanzado los niveles deseados. Aún estamos a tiempo de mejorar.”
Los próximos meses serán decisivos en opinión del máximo responsable de la Fundación CEDE, “porque a mediados del año que viene tendrán lugar dos acontecimientos cruciales: por un lado, se estarán concretando los proyectos de inversión que recibirán fondos del tan esperado Plan Europeo de Recuperación. Y por otro, el Banco Central Europeo estará revisando los términos de sus Programas monetarios de emergencia. Los representantes políticos deben acordar y comprometer una agenda de reformas estructurales amplias, profundas y estables. Culminar reformas de esta envergadura pasa por alcanzar consensos políticos amplios. Y en esta materia, solo podemos confiar en la racionalidad de nuestros líderes políticos. Por ello, me sumo a las voces de quienes reclaman, a las distintas fuerzas políticas que estén a la altura que exige el momento actual. Y que antepongan los intereses del conjunto del país a cualquier otra consideración".
La vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, afirmó que “estamos actualmente en una fase de reactivación desde mayo. El tercer trimestre se ha caracterizado por un crecimiento intenso, debido a las medidas adoptadas, y nuestra previsión es que la recuperación se intensifique en 2021”.
Para Calviño, la intensidad de la recuperación “dependerá de la eficacia del control de los rebrotes en nuestro país y de generar un clima de confianza en la sociedad. Lo que más daña a la economía es la incertidumbre”.
Según la ministra, como factores externos para esta recuperación “dependeremos de la evolución económica de Europa y el resto del mundo, pues nuestra economía es muy abierta y nos afecta lo que suceda en otros países. Y también será fundamental cuestiones geopolíticas como la negociación del Brexit. La situación es muy volátil y todas las previsiones han de ser tomadas con cautela y trabajar día a día para tomar las medidas adecuadas en cada momento”.
Tras hacer un repaso a las ayudas provenientes de Europa y que se comenzarán a desplegar desde 2021, Calviño señaló que nos quedan meses duros por delante. “En tiempos de cambio es indudable que hacen falta liderazgos transformadores como los del Gobierno, los agentes sociales y el de los directivos empresariales, que tienen que tener un papel fundamental en la transformación de nuestro modelo productivo. Solo actuando conjuntamente se pueden sacar proyectos de país de esta envergadura”.
Paralelamente al Congreso se ha celebrado el ‘Encuentro de Jóvenes – Talento en Crecimiento’, permitiendo que casi 700 estudiantes participen en las conferencias tanto presencialmente como vía streaming con el objeto de poner en valor su talento y empoderarles