Primero vivieron las amenazas y ahora Javier Tebas; desde La Liga en directo y Aleksander Ceferín, desde la UEFA, les han marcado un gol por toda la escuadra.
Por encima del deporte están los negocios y el futbol en Europa es un inmenso campo sembrado de dinero que unos pocos se disponen a recolectar. El presidente del Madrid lanzó la mejor idea desde hace muchos años. Se trataba de que jugaran los mejores contra los mejores, en una competición de estrellas que removiera las anquilosadas y viejas estructuras del “deporte rey”.
Como el propio Florentino se ha encargado de resaltar todos los sueldos han sufrido recortes por la crisis de la pandemia, menos los de los dos presidentes de La Liga y de la UEFA, que han aumentado de forma escandalosa en el último año. Se entiende a la perfección que tengan miedo a los cambios. Controlan la burocracia sin jugarse ni un duro de su propio dinero, sin tener que seguir a jugadores que prometen, sin tener que respaldar con su patrimonio cada temporada los resultados de los clubs. Un chollo que tanto Tebas como Ceferín quieren mantener contra viento y marea.
Necesitaban un “caballo blanco” para lanzarse hacia las grandes cifras y lo han encontrado en el fondo CVC, el mayor del mundo en canto a inversiones deportivas, un monstruo que mueve cada año decenas de miles de millones de euros en prácticamente todos los sectores en los que se puede invertir un poco y ganar un mucho.
El responsable en España, Javier de Jaime, ya quiso protagonizar una jugada de billar en el mundo periodístico. Entró en el “mundo Prisa” cuando todavía Javier Monzón y Ana Patricia Botín mandaban desde las bambalinas en El País y la Ser. Entró con uno de los fondos de CVC para apoyar al fondo Amber a hacerse con el poder. Una llamada desde la central de Londres le hizo abandonar su sueño y el de los que le apoyaban. A Josep Oughourlian le tocó esperar unos pocos meses pero al final se salió con la suya. Logró el apoyo de Telefónica y Vivendi y acabó con toda una historia en el mundo de la comunicación, la de la familia Polanco.
De los periódicos y la radio a los campos de futbol. Esta vez a De Jaime no le van a parar sus jefes. Un poco más de dos millones de euros y todo un entramado de nuevas sociedades va a aparecer en el mundo del balompié español y de forma muy rápida en el europeo. Tebas y Ceferín quieren coger la idea de Florentino, hacerla “ más democrática” y seguir sentado en sus respectivas poltronas. Otra guerra en la que los que perderán al final serán los socios, los aficionados y los amantes del deporte en general.
Una guerra con muchos frentes, en la que vamos a ver cómo combaten y con qué armas varios de los grandes dirigentes empresariales y financieros de España. El primer SuperGol lo han marcado los dos abogados, queda por ver qué harán Luís Rubiales y los propios futbolistas. Puede que al final todos se pongan de acuerdo y se repartan el futuro botín.