Martes 21 de octubre de 2014
Unos ministros, como el titular de Educación, quieren irse al dar por terminada su misión en el gobierno. Otros, como el responsable de Agricultura, se niega a convertirse en el rostro del Partido Popular en Andalucía y se " ofrece" para estar en Europa, a ser posible como Comisario sustituyendo a Joaquin Almunia. Y el resto se pregunta un día si y otro también por las intenciones del presidente desde este mediados de noviembre al mes de marzo, fecha en la que tiene que estar cerrada la lista de los candidatos del partido en las elecciones europeas.
Entre los 54 españoles que irán a Estrasburgo hay muchos huecos por cubrir en las seis formaciones que tienen representación parlamentaria desde 2009. El PP cuenta con 23 representantes y sabe que a partir del 25 de mayo tendrá algunos menos, lo mismo que le puede pasar al PSOE con sus actuales 21, mientras que el resto de fuerzas y coaliciones que lograron escaño cuentan con una subida importante partiendo de los bajos niveles en los que están.
La lista del PP la encabezó Jaime Mayor Oreja, que lo tiene difīcil para repetir en ese puesto pero que podría ir en la larga lista en puestos de salida. Entre los actuales ministros, Ana Mató es una candidata para viajar a Europa, lo mismo que Miguel Arias Cañete. Otros aspirantes como los presidentes de Murcia, Ramón Valcárcel, y de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, tienen el cansancio de muchos años de gobierno y puede que Mariano Rajoy les premie con su " salida" de Murcia y Valladolid. Y otro de los que pueden terminar en la lista, pese a sus intentos de volver al Ejecutivo, es Javier Arenas. En el centro de poder que es La Moncloa lo ven como una buena salida para el político sevillano.
Entre los socialistas es seguro que no repetirá López Aguilar, muy ligado a los proyectos de Carma Chacón, lo demás depende de la convocatoria de las primarias internas, de su calendario y de lo que " descubra" Pérez Rubalcaba, aunque los más maliciosos del PSOE mandarían a la vicesecretaría general y a alguno de los aspirantes a la sucesión en el liderazgo. Una forma de alejar adversarios y de poder ofrecer pactos de cara a las listas de las elecciones generales.
En la coalición que forman CiU y PNV cambiará el catalán Ramon Tremora pero no esperan superar los dos escaños que tienen hoy en Estrasburgo, algo con lo que si sueñan en UPyD con Francisco Sosa Wagner y en el grupo de Izquierda Unida con Willy Meyer. La representación de EdP- V se olvidará de Oriol Junqueras y jugará a crecer entre los nacionalistas. Falta por saber sí fuerzas de la extrema derecha, que no lograron los votos necesarios, se sumarán desde España a la alianza que acaban de firmar la francesa Marie Le Pen y el holandés Geert Wilders, una alianza pensada para deshacer la UE desde dentro.
Volviendo a nuestros ministros y su continuidad en el Ejecutivo, la gran pregunta está en el área económica. Si Rajoy se anima y elige un vicepresidente económico, las apuestas están lejos de Luis de Guindos y de Cristobal Montoro, una forma de impedir que se visualice la victoria de uno sobre el otro. En el Ministerio de Empleo dan por segura la salida de Fátima Bañez pero su " desembarco" en Andalucía para sustituir al presidente del PP y alcalde de Sevilla está más que nunca en el aire. En Defensa nadie piensa en sustituir a Pedro Morenes teniendo en cuenta el empeño que puso el Rey en su persona . Y en Interior, pese a todos los cambios introducidos por Jorge Fernández, su amistad personal con Rajoy parece que le blindan de una sustitución.
Si la mayoría de los dirigentes del PP dan por segura la salida de Alberto Ruiz Gallardón del Ministerio de Justicia, no todos coinciden en su futuro, con tres posibilidades abiertas, pero no al mismo nivel: como muy poco probable está el Ministerio de Fomento, en el,que Ana Pastor ha puesto orden pero ha perdido la fuerza de la inversión necesaria para que tenga repercusión en el empleo; como probable, un cambio con el titular de Exteriores, José Manuel García Margallo, algo que al ex alcalde y ex presidente de Madrid, le apetecería probar; y por ultimo, la salida pura y dura del gobierno y su pase a la esfera privada.
La que aparece como intocable, aunque rebajada de sus actuales y múltiples funciones, es la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, que podría compartir con un segundo vicepresidente ese nivel en el gobierno.
En el año 2009, la abstención en España se fue al 55%, muy similar a la del resto de los 28 países que votan en Europa. El año que viene puede ser superior por el cansancio de los ciudadanos y dar una " ventaja" a los grupos más radicales que contarían con un electorado más fiel y más dispuesto a castigar a los grandes partidos. Lo que si parece seguro es que ni PP ni PSOE lograrán entre los dos esos 44 escaños sobre el total de 54 que consiguieron en los últimos comicios de carácter continental.