Una comida de dirigentes del Partido Popular, muy ligados hace años a José María Aznar, en uno de los mejores restaurantes regionales de Madrid, celebrada el mismo día en que se daba a conocer la designación del " malagueño" Moreno Bonilla para dirigir el partido en Andalucía
Producía ataques de nervios y preguntas en los distintos grupos y familias que se disputan el poder interno con vistas a las próximas elecciones e incluso a lo que será la sucesión, cuando toqué, de Mariano Rajoy.
El martes, once de febrero, los antiguos integrantes del " Clan de Becerril" se reunían a comer en el restaurante del Centro Riojano de Madrid, calle Serrano 25, un edificio histórico y centenario en el núcleo central de la zona más " popular" de la capital. Menú de 20 euros a pagar a escote por cada uno de los convocados por Gerardo Camps, hoy diputado en el Congreso por Alicante y ex vicepresidente de la Generalitat valenciana.
Aquellos jóvenes que a finales de los años 90 se reunían todos los veranos en torno al presidente del gobierno, José María Aznar, en el hotel " Las Gacelas" del pueblo de Becerril de la Sierra, ya han cumplido los 50 años y ocupan puestos más o menos importantes en la Administración del Estado y en la estructura del Partido Popular. El que ejercía de líder por su proximidad familiar con el inquilino de La Moncloa, Alejandro Agag, dejó la política por los negocios, pero los contactos personales se han mantenido.
Un fin de semana, de viernes a domingo, aparecían por la localidad madrileña Esteban González Pons, hoy vicesecretario del PP; José Ignacio Echaniz, hoy consejero de Sanidad en el gobierno de María Dolores Cospedal en Castilla la Mancha; Juan Manuel Moreno, futuro presidente del PP andaluz y aspirante a gobernar la Junta de Andalucía; Sigfrido Herraez, ex concejal del Ayuntamiento madrileño y hombre próximo a Esperanza Aguirre; Tomás Buegos, hoy Secretario de Estado de Seguridad Social; Lucía Figar y su hoy marido Carlos Aragonés, ambos muy ligados al ex presidente Aznar y ella consejera de Educación en los gobiernos de Aguirre e Ignacio González; y así hasta una larga lista de nombres a los que se fueron uniendo de forma más o menos ocasional otros aspirantes al poder que llegaban desde otros grupos como fueron los casos de Jorge Moragas, hoy todopoderoso Jefe de Gabinete del Presidente Rajoy, Adolfo Suárez Illana, Enrique Núñez, el expresidente valenciano Francisco Camps, Miguel Ángel Villanueva, Sandra Moneó, Gabriel Elorriaga, Alberto López Viejo, e incluso personajes tan dispares como Jacobo Gordon, Francisco Correa, Álvaro Pérez, Alejandro Ballesteros o Tito Pajares.
Lo que comenzó como unas cenas mensuales de amigos en " La Polvera", cerca del Palacio Real era en el segundo mandato de Aznar como presidente del Gobierno una fuente de poder y de futuro. Un poder y un futuro que cambia tras la derrota de 2004 y el regreso del PSOE al poder con José Luis Rodríguez Zapatero, y que prácticamente desaparece con la consolidación al frente del PP de Mariano Rajoy y la irrupción del llamado," Clan de Pontevedra".
En este comienzo de 2014, con el Partido Popular convulso por las luchas internas y la cercanía de nuevas elecciones a todos los niveles, el viejo " Clan de Becerril" vuelve a reunirse y despierta tantos recelos y nervios como esperanzas entre aquellos que lo formaron. Así debió entenderlo la presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre, que apenas 24 horas después de celebrada la comida en el " Centro Riojano" llamaba a varios de sus asistentes para preguntarle por las intenciones del grupo y la posibilidad de establecer apoyos mutuos para los próximos meses.
La " estrella" de la comida habría sido Juan Manuel Moreno Bonilla, pero su elección por Rajoy para dirigir el PP de Andalucía le obligó a disculparse con sus compañeros, al igual que lo hizo Esteban González Pons. Sí estuvieron Carlos Floriano, Ricardo Tarno, Antonio Sanz, Marta Torrado, Sigfrido Herraez, Ramón Moreno, Conrado Escobar, Laura Esteban, Ignacio Echaniz, Pedro Calvo, Tomás Burgos, y el convocante, Gerardo Camps.