Un gol de Siovas permitió al Leganés lograr el empate (1-1) frente al Sevilla en el partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey, después de que Muriel marcase para los andaluces en la primera parte de una eliminatoria que se decidirá dentro de siete días en el Ramón Sánchez Pizjuán
No se fue contento el Sevilla de Butarque, después de tomar ventaja, y seguramente lo haga más un Lega que vivió el choque como una fiesta. El coso pepinero, a reventar, y la oportunidad de hacer historia sigue más latente que nunca. Lo demostraron los seguidores locales con el cántico de "sí se puede" al término del partido.
El equipo de Montella fue superior en la primera mitad y pronto desactivó el plan del Leganés. Los andaluces aprovecharon el vacío de los pepineros en el centro del campo y Sarabia campó a sus anchas. El capitán nervionense fue quien construyó el primer tanto del partido en un desajuste de los locales. Balón a la espalda de la defensa y gol de Muriel.
El colombiano, el fichaje más caro en la historia del Sevilla, no falló y la cruzó a la perfección al segundo palo. El 0-1 detuvo la producción del Leganés hasta el tramo final del primer acto. Beauvue, en un robo de Gabriel, perdonó el empate y fue el Sevilla quien pudo haber ampliado su renta en dos acciones que salvó Champagne de forma providencial.
El innegable trabajo del entrendor puso alas al Leganés y cambió su versión en la segunda mitad. Más presión y unos metros hacia delante acabaron dando sus frutos. A los diez minutos de la reanudación consiguió igualar el encuentro Siovas con un cabezazo en la misma línea de gol. Sergio Rico no logró atrapar el balón y permitió al central griego colocar el 1-1.
Los de Garitano pasaron a controlar el partido dejando al Sevilla la contra y el balón largo en unos minutos en los que el Leganes buscó la portería rival. Fue toda una prueba de fuego para la improvisada posición de Jesús Navas, que parece haberse hecho dueño del lateral derecho sevillista.