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Los dos primeros ministros: Naftali Bennet y Yair Lapid. Dos años cada uno. |
Israel: fin de la era Netanyahu
jueves 17 de junio de 2021, 09:03h
Se acaba la era Netanyahu en Israel y en el mundo, porque lo que ocurre allí tiene amplia repercusión mundial, pero nadie sabe cuanto va a durar el octopartito formado para gobernar el país de los judíos sionistas.
El propio ex presidente, que ha estado como primer ministro durante 16 años en dos etapas, no descarta volver a gobernar a pesar de que está inmerso en un proceso judicial por sobornos fraude y abuso de poder que podría acabar con su carrera política al menos.
Durante sus mandatos ha mantenido un continuo toma y daca con los distintos presidentes norteamericanos con los que ha tenido que lidiar ya que Israel depende en gran parte del apoyo de los Estados Unidos.
Han hecho falta hasta tres convocatorias electorales para echarle y aún así y todo, el nuevo gobierno puzzle contó solo con 60 votos de los 120 escaños que forman la Kneset o parlamento israelí. Los votos ene contra fueron 59 y todo se decidió por una abstención.
El multimillonario tecnológico y religioso Naftali Bennet, cuyo partido Yamiona solo tiene siete diputados, será el primer ministro durante dos años. En agosto de 2023 le sustituirá Yair Lapid, un experiodista que fundó un partido centrista y secular, Yesh Atid, y se convirtió en el árbitro de la situación al conseguir 17 escaños en los últimos comicios. El cargo de primer ministro alterno fue creado para resolver la crisis política israelí de 2019-2021.
Lo más curioso es el apoyo conseguido de los cuatro diputados islamistas, del partido Rama, liderado por Mansour Abbas, máxime cuando en la última intifada palestina hubo una fuerte participación de los palestinos que viven en Israel contra los ataques aéreos ordenados por Netanyahu contra Gaza.
Nadie espera, y menos los palestinos, cambios den la política israeli, ya que el nuevo primer ministro es un fuerte defensor de los asentamientos israelíes y se opone a un estado palestino.
Bennett nació en Haifa, siendo el menor del los tres hijos de Jim y Myrna Bennett, inmigrantes judíos de San Francisco que llegaron a Israel en noviembre de 1967, semanas después de la Guerra de los Seis Días. Allí ejercieron como voluntarios en el Kibbutz Dafna, donde aprendieron hebreo.
En 2013 afirmó que la Línea Verde, que marca los límites entre Israel y los territorios palestinos, «no tiene sentido» y uno de los anuncios de su campaña electoral avisaba de que «nunca habrá plan de paz con los palestinos». Tenía intención de anexionar la mayor parte de Cisjordania y dejar algunas ciudades palestinas como Ramala, Nablus y Yenín con autogobierno pero con seguridad israelí.
Yair Lapid, de 57 años, es un periodista muy famoso en Israel donde ha dirigido y presentado varios programas de televisión que le han hecho ser una de las peresonas más populares del país. Durante dos años dirigirá los Asuntos Exteriores para luego convertirse en jefe del gobierno. Fue ministro de Economía con Netanyahu en 2013.
Netanyahu consiguió que Donald Trump trasladara la embajada norteamericana de Tel Aviv a Jerusalén que tanta Obama, como Trump y ahora Biden apoyaran los ataques sobre Gaza como un derecho de defensa frente a los palestinos. Durante su etapa llegó a ayudar a los yihadistas del Isis o Estado islámico e intentó, por todos los medios, conseguir que Estados Unidos atacase e incluso invadiera Irán, país a quien el ex primer ministro atribuye todos los males contra Israel.