El sobrino del Rey sin embargo esperó escondido en una sala de la discoteca a que la policía se fuera y finalmente volvió a su casa por sus propios medios, donde creemos que el enfado de su padre no tuvo que ser muy fuerte, ya que al día siguiente volvía a salir por el centro de la capital y repetía en la conocida sala
La revista LOVE en su portada de la semana pasada sacaba a Froilán bajo el titular Su cambio radical, tras pasar un año en una escuela militar de EE.UU, pero evidentemente lo cortés no quita lo valiente y a sus casi 18 años a un chico de esas edades lo que le gusta es salir... salir con sus amigos a bailar y más tras varios meses alejado de casa.
A pesar de que todavía no ha cumplido la mayoría de edad al hijo mayor de la Infanta Elena y Jaime de Marichalar le gusta disfrutar de la noche madrileña, y de la sección light de una de las discotecas más conocidas de la que fue relaciones públicas,
ha pasado a frecuentar otra famosa discoteca de la capital, pero esta vez en su horario nocturno.
Según ha podido saber CHANCE de buena tinta, la noche del viernes Froilán se encontraba con amigos en la conocida discoteca, donde disfrutó del ambiente y la música desde un reservado alto, al que solo tenían acceso sus amigos y donde no faltaban las risas...
Pero por lo visto el sobrino del Rey se olvidó de avisar a su padre o se le pasó la hora de volver a casa, pero sobre las cuatro y media de la mañana Jaime de Marichalar mandó a una patrulla a que fueran a recoger al menor a la discoteca y le trajeran de vuelta a casa.
Froilán esperó escondido en una sala de la discoteca a que la policía se fuera y finalmente volvió a su casa por sus propios medios, donde creemos que el enfado de su padre no tuvo que ser muy fuerte, ya que al día siguiente volvía a salir por el centro de la capital y repetía en la conocida sala.