Que se quiera emplear a Venezuela como arma política ante las elecciones que vienen habla muy poco y muy mal de los que lo hacen, ya se llamen Rodríguez Zapatero o Albert Rivera. Es una estrategia basada en la desesperaciòn ante el fracaso que presienten para sus siglas. Es imposible que Pablo Iglesias y los suyos, por más relaciones que hayan tenido con el regimen bolivariano de Hugo Chavez y Nicolás Maduro, puedan implantar ese sistema populista en España. No creo que quieran, pero si así fuera serïa imposible y fracasaría al primer intento.
Lo que han hecho el expresidente del gobierno y el líder de Ciudadanos no lo podrían hacer en China, ni lo intentarían en Arabia Saudí, por poner dos ejemplos muy distintos. No me gustaba el que fuera militar golpista Chavez, ni me gusta un pelo su sustituto. Creo que no hacen ningún bien a su país, pero de eso a presentarse en Venezuela y apoyar un " golpe de estado blando" va un abismo.
Mientras se habla del pais iberoamericano y se utiliza para frenar a Podemos no hay que hablar de las pensiones, de la educación, de la deuda püblica, de los cientos de miles de millones que están en el extranjero y que apenas pagan impuestos, de las administraciones públicas y de la gestión de los nuevos Ayuntamientos. No se habla de España, que es lo que tendrían que hacer los candidatos. Claro que es más fácil sacar a pasear a Maduro que al gobernador del Banco Central Europeo.
Siento que están insultando a mi inteligencia. A la inteligencia de los ciudadanos a los que se nos pide el voto para el 26 de junio. Lo que lleva años pasando en Venezuela tienen la culpa los antiguos partidos contra los que votaron mayoritariamente los venezolanos.
En este mes que queda para ir a las urnas me temo y mucho que va a aumentar la crispación, que va a aumentar la violencia, que en las esta España nuestra en la que vivimos estamos avanzando como los cangrejos, hacia atrás.